Round One... Fight!!! Street Fighter Deck Building Game November 25 2014


Creo que hay poca gente que no conozca aun las palabras que sirven de título a este review. Algunos os preguntareis ¿juego de mesa de Street Fighter? Pues sí. Se trata de un juego de construcción de mazo que utiliza la mecánica ideada por Cryptozoic Games para sus deck-buildings junto al entorno Street Fighter para crear un juego que, a pesar de usar un sistema no diseñado específicamente para esta ambientación, logra un muy buen resultado.

Descripción:

Se trata de un juego de construcción de mazos, es decir, durante la partida nuestra principal prioridad será comprar cartas para nuestro mazo y así ir consiguiendo los tan ansiados puntos de victoria que determinarán el ganador. Sin embargo, a diferencia de la mayoría de juegos de este tipo como Dominion o Thunderstone, en Street Fighter Deck Building Game deberemos también defendernos de los ataques de los otros jugadores y atacar a aquellos que creamos conveniente. Esto es algo que me gusta especialmente pues siempre he echado en falta un poquito de “odio” entre jugadores en los juegos deck-building.

¿Con quien lo jugamos?

El juego está planteado para que puedan jugar de 2 a 5 jugadores, sin embargo, las partidas con 2 y 3 no consiguen sacarle todo el potencial. Con 4 ya podemos disfrutar plenamente y con 5 es ideal. Si quisiéramos incluso podríamos juntar un par de copias del juego para disfrutar de partidas enormes de más de 6 personas, ya que no es un juego que se haga especialmente largo una vez te conoces un poco las cartas.

El sistema de juego es relativamente simple y un par o tres de turnos son suficientes para aprender a jugar: robar, jugar, comprar y descartar. Lo más difícil es quizás entender el texto de las cartas y es necesario cierto nivel de comprensión lectora para ello. Es recomendable jugar con mayores de 14 – 15 años para no tener que estar enseñando las cartas de la mano constantemente a nuestros rivales. A día de hoy no existe traducción al castellano y por lo tanto deberemos saber cierto inglés para disfrutarlo. Con un inglés básico y conociendo el significado de alguna palabra concreta (foe = enemigo) no habrá problema, no hay que ser Shakespeare para poder jugarlo.

¿De que va esto?

El objetivo del juego consiste en conseguir el mayor número de puntos de victoria posibles en nuestro mazo. Y lo haremos como en todos los juegos de construcción de mazo comprando las cartas con el power, la moneda del juego. Cada carta del juego posee un valor en puntos que cada jugador sumará al final de la partida para determinar el vencedor y un coste en power para comprarla. A mejor carta, más puntos y más cara de comprar. Hay varias tipologías de cartas – superpowers, heroes, villians y objetos – y variados efectos al poner la carta en juego para acelerar el mazo o ganar power. Pero lo importante es controlar las cartas de ataque y defensa: los ataques se juegan en nuestro turno mientras que las defensas lo hacemos fuera de turno para protegernos, la cual cosa nos reduce la mano a cambio de ahorrarnos los efectos del ataque.

La cartas que más puntuación otorgan son los escenarios (USA, Japón, Rusia... los de toda la vida del Street Fighter, vaya) así que suele ser una buena estrategia acumular puntos de poder para comprar dichas cartas siempre que sea posible.

¿Cómo jugamos?

Preparar el juego no es engorroso. Mientras que en otros juegos de construcción de mazo hay que escoger qué cartas jugarán mediante un draft, la cual cosa suele alargar la preparación, en el juego de cartas de Street Fighter no lo hay. Todas las cartas juegan en cada partida. Tan solo hay que poner el mazo en el centro de la mesa y destapar las 5 primeras cartas que serán las que estarán disponibles durante el turno del primer jugador. Además de este mazo de mercado hay varias cartas que siempre se podrán comprar y que colocaremos en mazos separados: las kick, las localizaciones o escenarios, y las odiadas weakness que nadie comprará pero que nos perseguirán toda la partida. ¡Ojo porqué tener weakness en el mazo al finalizar la partida nos restará puntos de victoria! Hecho esto, cada jugador recibe su mazo inicial, el personaje con el que jugará la partida – en principio aleatoriamente, pero para cambiar estas cosillas están las normas de la casa - y listos para comenzar.

Una vez tengamos los cuatro mazos en el centro de la mesa correctamente distribuidas empezará la partida, que se desarrolla por turnos. Durante su turno, el jugador activo roba 5 cartas y las jugara cartas de su mano para gastar el poder que le permita comprar cartas y atacar a los otros jugadores si le es posible. Una vez no pueda jugar o comprar más cartas el jugador repondrá la zona de compra y pasará el turno al siguiente jugador.

Cuando no queden cartas en el mazo principal o alguien compre el último escenario, la partida terminará y se procederá al recuento de puntos.

Valoración del Concilio de Jugones

Magnífico. A pesar de decepcionar inicialmente a alguno por lo simple del sistema de juego utilizado, tras la primera partida con 4 jugadores todos quedamos encantados. Es un juego que ofrece muchísimas posibilidades de construcción y donde no hay una sola fórmula ganadora. Según qué luchador lleves será preferible seguir una estrategia u otra - utilizar héroes o villanos, comprar ataques o defensas, por ejemplo - pero todas son válidas y pueden llevarte a la victoria. El juego está bien equilibrado y genera constantemente esos rifi-rafes que tanto nos gustan y que le dan tanta vida a los juegos... – frases como ¿Porqué a mi?, ¡Pero pégale a éste que se esta enchetando! ¡No entiendo lo que haces! son habituales - Además hay que mencionar el genial arte de las cartas, que recuerda constantemente al videojuego, y la maravillosa caja en que viene el juego, pues viene con clasificadores para cartas con fundas. ¡Lo nunca visto! Una chorrada pero muy práctico. En resumen: ha gustado mucho y se ha convertido en una opción siempre apetecible cuando nos juntamos el Concilio de Jugones al completo.

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Autor: Adrià Prat